Un buen líder se caracteriza por su capacidad para tomar decisiones oportunas en toda clase de situaciones, así como por dirigir Liderazgoa otras personas ayudándoles a comprender y resolver los problemas que se les plantean.

Para tomar decisiones oportunas, los líderes han adquirido en primer lugar una cierta capacidad de juicio propia que pueden intentar inculcar en los demás. Esta capacidad de juicio se explica porque en el caso de los líderes su acumulado de experiencias se tradujo en un desarrollo de una forma de comprensión que les permite asociar causas y efectos de distintos factores como circunstancias complejas, clases de personalidad, situaciones imprevistas o difíciles de explicar.

Una vez se ha adquirido esta capacidad, el líder la aplica con naturalidad y automáticamente todo el tiempo solucionando problemas mientras los demás apenas están planteándoselos. Los resultados de ponerla en ejercicio hacen que aumente su confianza en sí mismo y que los demás confíen en él y lo vean como un referente.

Sin embargo, para quienes no comprenden de lo que se trata, simplemente parece que el líder tomara las decisiones de manera puramente instintiva. Así que vale la pena preguntarse:

¿Cómo se logra hacer todo esto? ¿Qué debemos hacer para liderar un equipo de trabajo correctamente?

Medidas concretas para desarrollar su liderazgo

Algunas de las acciones que puede tomar para desarrollar su capacidad de liderazgo son:

  1. Tome decisiones

La capacidad de acertar en las decisiones que toma sólo puede desarrollarse con su ejercicio a lo largo del tiempo y sobre la reflexión que haga  permite sobre experiencia previas. Intente tomar el hábito de hacer listados de decisiones que debería tomar. Más allá de las tareas o problemas concretos, tenga también en cuenta ir tomando decisiones sobre su propio estilo de liderazgo y el que deberían tener otros, así como medidas para orientar los comportamientos y actitudes propios y de otros.

  1. Haga que los demás se sientan cómodos hablándole

Es muy fácil intimidar a los otros cuando se toman decisiones o se ejerce liderazgo. Intente abrir espacios para tomar en consideración las inquietudes y propuestas de los demás. Esto permitirá que se sientan más cómodos con usted y pueda desarrollar con más tranquilidad las tareas propuestas. Además, enriquecerá sus puntos de vista con otros, así como con otras experiencias, lo que le servirá tener en consideración más factores de los que sólo podría imaginar y producir juicios más precisos.

  1. Comunique a los demás sus expectativas

Intente mejorar cada día sus capacidades de comunicación con los demás, sobretodo cuando se trata de transmisión de expectativas. Esfuércese por hacer que los otros conozcan comprendan las suyas, así como por comprender las que ellos tienen de su comportamiento.

  1. Rete a los demás para que piensen y aporten por su cuenta

Rete fraternalmente a quienes lo acompañan para que se animen a pensar por sí mismos y exponer los que ellos decidirían. Tenga en cuenta que cada persona tiene sus propias capacidades y áreas de interés, pero rételas para que su proceso de aprendizaje se haga permanente, sigan creciendo y se sientan relevantes.

  1. Proporcione retroalimentación permanente a las opiniones de los otros

La contracara de la exigencia reside en la obligación de responder a las inquietudes de los demás. Retroaliméntelos con sus propias opiniones sobre sus inquietudes o sugerencias, reconozca cuando tienen razón o han hecho algún aporte. De lo contrario, las personas pueden sentirse fácilmente desmotivadas a continuar aportando. Haga preguntas cuando lo necesite para ayudarse en las decisiones o contar con las impresiones de los otros. De esta forma hará sentir a los otros que pueden contar con usted y que se interesa por ellos. Además podrá aprovechar cada nuevo aporte para enriquecer sus análisis y capacidades.

6.  Intente encontrar la mejor ubicación para cada persona y talento

Caracterice lo más precisamente que pueda cuáles son las virtudes y defectos de cada una de las personas con que interactúa y cuenta para sus proyectos. Piense en cuáles serían los mejores escenarios para activar las capacidades de sus compañeros, colegas o subordinados.

7.  Mida y recompense en la medida de sus posibilidades los aciertos de los demás

Al hacer seguimiento del propio desempeño y del ajeno, tenga en consideración los resultados, pero  también el trabajo duro y el esfuerzo. Reconózcalos y busque algún recurso para recompensarlos.

8.  Lidere con el ejemplo y evite la procastinación

No postergue sus responsabilidades o decisiones. El criterio fundamental con el que nos evalúan los demás siempre es el ejemplo de nuestras propias acciones. Para decidir eficientemente lo primero que hay que lograr es evitar la negligencia de no decidir y no enfrentar los problemas.

Aprenda a disfrutar las responsabilidades y mostrar la forma de ayudar a los otros a disfrutar las que a ellos les corresponden.

Procure tener en consideración e implementar cada uno de estos consejos, de esta forma irá rápidamente incorporando las capacidades requeridas para tomar decisiones acertadas y fomentarlas en los otros.

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies